México, 9 Sep (Notimex).- Desde septiembre de 2015, cuando comenzó la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, el avance de las obras continúa, en espera de la consulta ciudadana del domingo 28 de octubre, que definirá el futuro de la terminal área.
En la pista 2 ya se inició la remoción del material de la precarga con el que se aceleró el hundimiento del terreno (cimentación compensada), para lograr una consolidación adecuada del suelo.
En junio pasado inició la construcción de la Torre de Control de Tráfico Aéreo, con los trabajos de excavación, armado y colado de plantilla, colocación del sistema de impermeabilización de la losa de cimentación; así como el suministro, instalación y nivelación de 12 aisladores sísmicos de triple péndulo.
Esta instalación cuenta con un avance financiero del 18 por ciento y del 26 por ciento en físico, y con una altura de 90 metros, es vital para la operación del aeródromo pues dará servicios operacionales y de navegación, pronóstico y observación meteorológica y el control de plataforma y asignación de aparcamiento de aeronaves.
Ubicada al norte de la terminal de pasajeros principal, contará con salas de equipos, cuartos de control, áreas administrativas y áreas operativas y estará aislada en su base con soportes de triple péndulo de fricción.
Por su parte, en el edificio Terminal se concluyó la instalación primaria del primer fonil de un total de 21 y continúa el armado de 15 foniles más, los cuales medirán aproximadamente 45 metros de altura y que soportarán la envolvente de esta infraestructura.
Esta edificación representa un avance de 4.0 por ciento tanto físico como financiero, luego de que se terminó con la colocación de 865 lozas moduladas de 400 metros cuadrados cada una.
El encargado de la producción y montaje, Joaquín Loya Santiago, mencionó que están en proceso de armado 11 superestructuras mientras que el resto se llevaran a cabo durante el resto del año, y será hasta 2019 cuando se cuente con la totalidad, cada fonil contiene dos mil cien elementos, ninguno igual.
“El principal reto es tener un fonil armado entre seis y siete meses. Trabajan 46 personas especialistas (en su armado), toda la mano de obra es mexicana y con buenos resultados en algo que no conocíamos”, aseveró.
Para Loya, trabajar en este proyecto es una gran oportunidad para demostrar lo que son capaces, “nos va a dejar con mucha satisfacción dejarla terminada y suspenderla sería muy triste”.
El auxiliar de residencia del Edificio Terminal, Martín Gómez Garnica, comentó que un fonil hará la función de columnas del techo de esta instalación; se espera que la obra esté completa para el 21 de agosto de 2021, lugar en donde laboran dos mil personas.
“El nuevo aeropuerto es un gran reto personal. Muchas contratistas no tenían varias certificaciones pero gracias al aeropuerto lo están haciendo a nivel internacional. Sería lamentable (suspenderla) por la pérdida de trabajos”.
Al analizar los pros y contras para seguir con su edificación, la Unión Mexicana de Asociaciones de Ingenieros (UMAI) sostuvo que ante el avance en las inversiones se debe de continuar, siempre que se lleven a cabo una serie de recomendaciones como el riegos aviar, sistemas reguladores que afectan el lago Nabor Carrillo, mitigar problema ambientales.
Además de realizar un mejor análisis en el tema geológico y geotérmico, establecer costos de mantenimiento del proyecto en su conjunto, revisar el mejor esquema de participación accionaria, rentabilidad social y desarrollo urbano, procesos administrativos, entre otros.
Mientras que la Academia de Ingeniería de México afirmó que el NAIM traerá mayores efectos positivos para la economía nacional, un financiamiento bien planeado y cercanía.
Aspectos que también fueron sostenidos por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), organismo que aseguró que dicha alternativa es la mejor para atender la demanda aérea y abre oportunidades para el desarrollo regional.
El mes pasado, Javier Jiménez Espriú, propuesto como titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en el próximo gobierno, confirmó que el último domingo de octubre se llevará a cabo la consulta pública para definir el futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de México.
Señaló que los resultados se darán a conocer, después de haber conocido la opinión de la ciudadanía del que será el primer ejercicio democrático de la próxima administración encabezada por Andrés Manuel López Obrador.
Al cuestionar sobre cuál es la mejor opción para la obra del NAIM, Jiménez Espriú comentó que en los siguientes días se seguirá con la discusión sobre si continuar el proyecto en el Lago de Texcoco, o construir las dos pistas en la base área de Santa Lucía.
Enfatizó que lo prioritario es resolver, en el corto plazo, el problema de saturación que presenta el actual aeropuerto de la Ciudad de México y por ello es importante conocer los puntos de vista de expertos y de la ciudadanía en general.