Perder el beneficio del periodo sin intereses en una tarjeta de crédito es más común de lo que parece, y recuperarlo requiere un proceso específico que muchos usuarios desconocen. Este beneficio, que permite pagar compras sin cargos adicionales durante un plazo de hasta 50 días, se pierde cuando el tarjetahabiente deja de liquidar el total de su saldo al corte. Una vez que esto sucede, el banco comienza a cobrar intereses diarios desde el momento en que se realiza cada compra, incluso si el cliente paga antes de la fecha límite.
El problema radica en que, al no pagar el total del estado de cuenta en la fecha establecida, la tarjeta entra en un esquema llamado financiamiento revolvente. En este sistema, cada nuevo gasto genera intereses desde el primer día, sin el periodo de gracia habitual. Así, aunque el usuario liquide por completo su deuda en cualquier momento del mes, cualquier compra posterior acumulará intereses de forma inmediata.
Para revertir esta situación y “resetear” la tarjeta, el primer paso es liquidar todo el saldo pendiente, incluyendo los intereses generados hasta la fecha del pago. Es importante aclarar que este monto puede ser mayor al que aparece en el estado de cuenta, ya que los intereses se calculan diariamente y pueden acumularse después del corte. Por ello, se recomienda verificar el saldo exacto con el banco antes de realizar el pago.
El segundo paso es no utilizar la tarjeta hasta después del próximo corte. Esto es clave para que el banco registre un ciclo de facturación completo con saldo en cero. Si el usuario realiza compras antes de ese corte, el interés diario continuará aplicándose y el reinicio no se completará.
Una vez cerrado un corte con saldo en cero, el tarjetahabiente debe pagar el total del saldo en los siguientes cortes durante uno o dos periodos consecutivos, dependiendo de la política de cada banco. Con este historial reciente de pagos totales, la institución financiera reactivará el beneficio del periodo sin intereses, permitiendo nuevamente realizar compras y pagarlas sin cargos adicionales dentro del plazo establecido.
En resumen, “resetear” una tarjeta de crédito para volver a tener 0% de intereses implica disciplina y estrategia: pagar todo lo adeudado, dejar la tarjeta sin uso hasta el próximo corte, y posteriormente cumplir con el pago total en cada ciclo. Con estas acciones, cualquier usuario puede recuperar la flexibilidad y el ahorro que ofrece el uso responsable de este instrumento financiero.
